La falta de publicidad y comunicación sobre el desarrollo de esta edición podría ser una estrategia para evitar más campañas que dañen su imagen, o un indicio del impacto del boicot.
El 29 de junio se anunció el inicio de las selecciones para Miss y Mister Guinea Ecuatorial 2024 en Malabo y Bata. Este año, el certamen trajo dos novedades: un casting en España para el 7 de julio y una audición virtual, una medida inédita que no se había usado ni durante la pandemia de COVID-19.
A pesar de las innovaciones, esta edición está siendo sorprendentemente callada. Comentarios en redes sociales sugieren una notable disminución en el número de candidatas en comparación con años anteriores. Esto ha llevado a especulaciones sobre la influencia de una campaña de boicot que comenzó online y se extendió a las calles de Malabo con carteles que mostraban la cara de la presidenta y el mensaje “boicot Miss Guinea Ecuatorial 2024: impagos, mentiras, abuso de poder”. Tal rechazo podría haber desanimado a los aspirantes.
También se sugiere que la falta de visibilidad del proceso en Malabo, Bata, Madrid y de manera virtual podría ser una estrategia de la organización para evitar una nueva ola de mensajes negativos y boicots. Con el evento final programado para el 7 de septiembre, la organización enfrenta el desafío de mantener el prestigio y la relevancia del certamen en un escenario donde la participación y la visibilidad son cruciales.
La situación actual del certamen Miss Guinea Ecuatorial 2024, indica que la campaña de boicot podría haber afectado no solo la cantidad de participantes, sino también la percepción pública del evento de belleza más importante del país, con posibles efectos duraderos más allá de este año. Seguiremos pendientes de los perfiles oficiales de la organización para conocer la evolución de esta edición.
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Texto: Sandra Sioto
